El primero del año y el más atípico, así fue la Pascua Militar que presidieron Felipe y Letizia

Si hay un momento que es esperado por el Rey Felipe y la Reina Letizia, tras sus vacaciones de Navidad es la vuelta al trabajo, la cual abren con la Pascua Militar.

Cada 6 de enero, tanto el Jefe de Estado como la Reina Consorte se presentan en el Palacio Real para dar inicio al acto que, este año, ha estado marcado por distintos tipos de circunstancias.

La primera, claro, es el frío que asechaba a Madrid ayer. Tal es así que el hijo del Rey Juan Carlos y la experiodista tuvieron que poner en marcha su ropa de invierno para poder estar al frente de la celebración.

Seguido a eso, también está la pandemia que, sin dudas, ha sido la circunstancia más significativa para Don Felipe, quien se tuvo que adaptar a todas y cada uno de las normas impuestas para poder llevar a cabo esa condecoración.

La primera novedad que fue a causa del Coronavirus es la rapidez con la que se efectuaron los saludos en el Salón del Trono. Ni los condecorados ni el soberano han podido mostrarse más afecto que un saludo con la cabeza.

No obstante, si hay algo que llamó sumamente la atención es los problemas que el padre de la Princesa Leonor ha tenido con la mascarilla. En más de una ocasión se ha mostrado incómodo y se la ha movido, pero solo se la quitó una vez.

Cuando llegó el momento del discurso, Su Majestad decidió prescindir del tapabocas para poder respirar y que, a su vez, se le entienda mejor a la hora de hablar, cuando dijo:

Junto a la Reina os transmito con gran afecto nuestra felicitación en esta Pascua, y nuestros deseos de paz, salud y dicha para todos vosotros y vuestras familias en este año que acaba de comenzar.