Complicado
La crispación de la Infanta Elena por los escándalos del Rey Juan Carlos y Victoria Federica
El Rey Emérito abonó de manera voluntaria sus irregularidades con Hacienda.El 2020 ha estado cargado de emociones para los Borbón, pues ni el Rey Juan Carlos ni Victoria Federica han dejado de protagonizar las portadas de los medios, y la única que podría pagar los platos rotos sería la Infanta Elena.
La hermana mayor del Rey Felipe se ha mantenido fiel al Rey Emérito, ignorando las polémicas que acechan a la Zarzuela por los actos de corrupción del exmonarca; los que también la han salpicado a ella.

La Duquesa de Lugo, Victoria Federica y Froilán tenían tarjetas opacas otorgadas por Juan Carlos I, cuyos fondos provenían de la cuenta de Allen Sanginés-Krause, un tercero ajeno a la Familia Real.
Se dice que con dicho dinero oscuro la tía de la Princesa Leonor compró a Nibelunga, el caballo que costó un cuarto de millón de euros. El Confidencial desveló que los plásticos también se habían usado para pagar varios caprichos de los nietos favoritos de Emérito.

A los viajes en Uber, compras en El Corte Inglés y clases de piano, se le agregan los viajes a Londres de la Reina Emérita y, quizá, otros gastos de Elena de Borbón que aún no se descubren.
Lo cierto es que hace unas semanas la ex de Jaime de Marichalar regresó de visitar a Juan Carlos I a los Emiratos Árabes, y esto nos demuestra la gran lealtad que le tiene a su progenitor.

Europa Press desveló que, así como Victoria Federica de Marichalar y Borbón, la cuñada de la Reina Letizia continúa con su vida como si nada pasara.
Se dice que el Rey Juan Carlos podría regresar a España en los próximos días, y el hogar de la Infanta se encuentra entre una de las opciones que tiene el exiliado para residir; aunque la Zarzuela sería la única válida para él.